Puro estilo frances: bombing sucio, rápido, muchas pompas, muchos camiones, letras simples i, de vez en cuando, verdaderos monstruos como piezas. Colorazos siempre, formas muy frescas, con una clara influéncia de la nueva escuela francesa, escritores como Horphe o Rizot le acompañan. Keno demuestra que existe competición en una ciudad tan improtante para el graffiti como París. Espero que lo disfrutéis!